Sunday, May 22, 2011

Los desesperados


Los desesperados se encuentran como se encuentran los desesperados.  Ella odia la soledad de una idea, de una vida pasada, pero ama el reflejo distorsionado de su recuerdo en el desesperado.  El desesperado odia la frialdad de una cama, así como todos los desesperados temen la plenitud de un sentimiento. Así se encontraron los desesperados, ella añorando lo que tuvo y el deseando lo que no tiene, y se juntan y se retuercen y se estremecen bajo el eclipse lunar de una bombilla, bajo la sombra de una falsedad, se retuercen y se estremecen tanto que se vuelve presos, y es por eso que ya no son desesperados, son reclusos, los presos, los devotos de una falsedad.

Los presos viven como viven todos los presos. Ella cree quererlo y el sueña con dejarla, pero son presos de una costumbre de un quimera.  Pero se quieren y se lastiman, pero no lastimar  de hacer daño si no de sentir lastima. Los presos saben que toda condena es finita, a menos de que por culpa de sus  aprisionados pensamientos, sea una pena de muerte o aun peor cadena perpetua sea.  La reclusa, así como las reclusas de  sanatorio psiquiátrico sueñan con su boda rosa, con maquillaje mímico, con fachadas graciosa, con bailes gitanescos.  Y el preso, ja! ya no quiere ser preso, quiere ser fugitivo, y fugitivo se vuelve huyendo de esa realidad. Y la presa, ja, la presa quiere ser fugitiva para ser presa, es por eso que dejaron de ser desesperados, y dejaron de ser presos, ahora son fugitivos.

Los fugitivos, déjenme decirles, los fugitivos ya no se quieren ni se lastiman, ni se honran ni se respetan, solo se encuentran para estremecerse, solo participan en mentiras simples.
        y aunque no lo creas yo te amo, te apuñalo pero te amo, pienso en otros pero te amo, quiero cambiarte, pero te amo. Dice la fugitiva, con sonrisas ficticias con actitud mitómana. 

-         y tu aunque no lo creas, te amo un poco mas de lo que tu me amas pero al revés, que no es invertido y menos convexo.  Responde el fugitivo con una satisfacción del deber cumplido.
Se mienten tanto y se retuercen y se vuelven a estremecer sin placer, y sin placebo encogiendo el corazón de poco a poco. Y ella le dice, - Si tuviera alas, volarías tras de mi.  Y el le contesta,-Te seguiría tan rápido con un ganso cojo con las alas congeladas. Y los fugitivos dejan de ser fugitivos, ya no son presos y aparentan no ser desesperados. 

Que futuro le queda a esta pareja, el mismo y obscuro futuro que le queda a la tuya!

No comments:

Post a Comment